Los filtros plantados de juncos
El tratamiento de las aguas residuales mediante filtros plantados de juncos consiste en reproducir los procesos naturales de la autodepuración encontrados en los suelos haciendo percolar las aguas por tratar en un macizo filtrante.
Contrariamente a los procesos "clásicos" de depuración, el sistema es de tipo semi-extensivo y no intensivo.
La naturaleza tiene el tiempo de hacer su trabajo de depuración, lo que presenta las siguientes ventajas:
- Rendimientos de depuración elevados y constantes en el tiempo.
- Protección máxima del medio receptor en virtud de la barrera física que representan los filtros (no hay ningún riesgo de salidas de los lodos con el efluente tratado).
- Mineralización lenta de los depósitos retenidos en los filtros ytransformación de los lodos en compost, reutilizables como acondicionamiento orgánico después de unos diez años de explotación (los procedimientos denominados intensivos generan lodos líquidos cuyas exigencias de gestión son diarias).
- Integración perfecta en el paisaje.
- Explotación facilitada comparable al mantenimiento paisajístico de los municipios.
Principio de funcionamiento
El macizo filtrante atravesado por las aguas residuales permite:
- Retener mecánicamente las materias en suspensión (contaminación llamada particular y coloidal) contenidas en las aguas.
- Servir de soporte a los microorganismos depuradores (degradación de la contaminación soluble)
- Realizar el drenaje de las aguas y las transferencias de aire.
Los juncos plantados en la superficie permiten:
- Una desobstrucción de la superficie del filtro gracias a la acción de los brotes jóvenes y los rizomas, cuyo desarrollo libera permanentemente espacios libres.
- Una transferencia de oxígeno del follaje a las raíces, dinamizando de este modo la actividad bacteriana del filtro.
- Un aumento de los sitios de fijación de los microorganismos.